Esto es todo lo que se sabe sobre el trágico asesinato de Paco Stanley
Han pasado 22 años desde aquella mañana de junio que conmocionó al entonces Distrito Federal. La noticia sobre el asesinato de Paco Stanley en el restaurante El Charco de las Ranas poco después de haber terminado la transmisión de su edición matutina de Una tras otra.
Más de dos décadas después todavía no hay certeza sobre las causas de este asesinato que puso el foco sobre la presencia del crímen organizado en la capital mexicana. Si bien es cierto que hubo muchos rumores que implicaba a sus colegas en el mundo del espectáculo y se habló acerca de supuestos nexos o deudas con narcotraficantes, hasta ahora no hay ninguna certeza.
Lo que sí hay, son muchas teorías que intentan esclarecer las razones de este crimen. A pesar de que las autoridades nunca lograron esclarecer totalmente la muerte del conductor, aquí recordamos las hipótesis que se mantienen hasta la fecha.
Vínculos con el narcotráfico
En el boletín de prensa de la PGJDF con fecha 27 de agosto de 1999 señala que había una estrecha relación entre Paco Stanley y Amado Carrillo “El señor de los cielos”, y que incluso lo recibía en sus oficinas.
También, existía un antecedente sobre un atentado en contra de Stanley en el que lo habían despojado de algunas pertenencias, no sin antes dejarle claro que se trataba de un mensaje enviado por Luis Ignacio Amezcua, otro capo del narcotráfico con quien supuestamente habría tenido una deuda.
Tras ese episodio, el conductor tramitó un permiso de portación de arma de fuego que le fue concedido el 11 de mayo de 1999, muy cerca de la fecha de su muerte. Además de contar con escoltas que lo acompañaban de forma regular.
“Mayito” lo habría puesto
Un expediente de la procuraduría capitalina sobre el asesinato de Paco Stanley señala que, por una fuerte deuda económica, Luis Ignacio Amezcua “El rey de las metanfetaminas” planeó el atentado en su contra junto con Erasmo Pérez Garnica “El Cholo”, durante una reunión en la zona 3 estancia 9 del Reclusorio Sur el 22 de abril de 1999.
Según dice el documento, “El Cholo” y Paola Durante, quien era bailarina en el programa de Stanley, debían acordar el día del homicidio con Mario Bezares, quien, a cambio de “ubicar a la víctima”, saldaría una deuda que también tenía con Amezcua y al mismo tiempo se libraría del préstamo que ltenía pendiente con su jefe y titular de los distintos programas en los que habían participado juntos.
El día del asesinato, en el restaurante El Charco de las Ranas el conductor de televisión fue asesinado de cuatro disparos en la cara y la cabeza; además, otro acompañante recibió seis disparos y un transeúnte que pasaba por ahí también resultó herido.
Mario Bezares resultó ileso, pues tardó 15 minutos en salir del baño, pero las constancias de la averiguación previa señalan que él se encargó de que Paco Stanley estuviera colocado en la posición exacta que requería “El Cholo” para llevar acabo el crímen. Luego de varios años de proceso tanto Paola Durante como Mario Bezares fueron puestos en libertad, aunque continúan cargando con el estigma de estos hechos.
“Andaba en malos pasos”, dicen
Los estudios llevados a cabo por los peritos establecieron que Paco Stanley presentaba lesiones en las fosas nasales, además de llevar una bolsa con cocaína entre sus pertenencias al momento del atentado, y en su vehículo se encontró un molino que servía para pulverizar esta droga.
De igual forma, es imposible olvidar el episodio en que Mario Bezares tiró por error una bolsa con polvo blanco mientras bailaba “El Gallinazo”, en plena transmisión.
También se determinó que entre sus ropas, llevaba una identificación vigente como servidor público de la Dirección General de Normatividad y Supervisión en Seguridad de la Subsecretaría de Seguridad Pública de la Secretaría de Gobernación, cargo que no ostentaba.
Incluso se señaló que un informante de la DEA declaró que Paco Stanley pertenecía a la estructura del Cártel de Juárez, en una de las líneas de investigación se le señalaba como proveedor de droga entre los círculos del mundo del espectáculo.
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Hasta ahora, todavía no queda claro quién mató a Paco Stanley, pero sus seguidores continúan recordándolo por sus producciones y por alegrar las tardes de las familias mexicanas.